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Mal empieza el Gobierno de Pedro Tón To. Tras el Consejo de Ministros, -del cual no voy a hablar por penoso-, a Pedro Tón To le empiezan a crecer los enanos.

Y no sólo porque te hayan pillado con el carrito del helado, cuando el vicesecretario de Política Social y Sectorial del Partido Popular, Javier Maroto, le ha acusado en Twitter de presumir de un máster falso publicado en la web del Congreso de los Diputados, al tener un simple PLGP, es decir, un curso de posgrado, sino también por el vergonzoso asunto oculto de su doctorado, como lo obtuvo y quien se lo regaló.

He comprobado por varias fuentes distintas que han leído con sus propios ojos la vomitiva tesis doctoral de Pedro Sánchez. Efectivamente, después de tanto misterio e impedimentos para mostrarlo sin sacarlo de la Universidad madrileña Camilo José Cela, sí consiguió el doctorado pero gracias al enchufe y la ayuda de un ex Ministro de Zapatero -y mentor suyo-, y un ex Secretario de Estado para el Deporte de Felipe González. Es más, le regalaron un “suma cum laude” como nota a esa tesis de trescientas veinticuatro páginas a doble espacio que escribió en 33 meses, que más bien parece un panfleto propagandístico del Gobierno de Zapatero.

Una de las fuentes, para conseguir la misma nota, tardó seis años y escribió dos tomos con más de mil trescientas páginas. Háganse una idea.

“El 90% del libro se lo hicimos en el Ministerio de Industria”, vino a decir el exministro de Zapatero en una mesa que fue organizada por el Ateneo de Palencia el 22 de marzo de 2017.

Ignacio Escolar, ¿Que hay del doctorado de Pedro Sánchez?

Esto don Ignacio Escolar, es un aviso para usted, que tampoco acabó la carrera de periodista y que con tanto ahínco machacó a Cristina Cifuentes hasta la extenuación social, política y moral, por no haber completado estrictamente un mastercito de los que te tocan en la tómbola si compras suficientes boletos.

Pero antes de seguir con el doctorado, decía «enanos» en plural, porque Sánchez ya está temblando ante la reacción de Pablo Iglesias por los ministros que ha elegido. Y razones tiene para temblar, pues el del chalé del Paseo de Riomonte nº 4, Bajo (La Navata), 28260, Galapagar, MADRID, -al cual reto públicamente a que él o Irene demuestren que lo compraron, pues el registro de la propiedad local se niega tras pagarla a dar información sobre la finca, mientras que el Registro de la Propiedad Nacional sí ha confirmado que ni el uno ni el otro tienen ninguna propiedad-, decía, está que trina.

Entre la que se le avecina por temor a que se sepa quién es (o ha sido) el verdadero propietario del inmueble y la traición de su amado y abrazado “Sanchesu-san” en la Moción de Censura, ayer desde Podemos habían reclamado en las horas previas un “ejecutivo transversal” (a saber que leches significa eso) y amplio, pero Pedro Tón apostó por gobernar, por lo que se ve, en solitario.

“Ha tardado 24 horas en olvidarse de quien le ha hecho presidente”, “Pedro Sánchez ha hecho un Gobierno con gente que le gusta a Ciudadanos y al PP. Pero hoy no es el día de criticar al Gobierno, que ahora tocan unas semanas de cortesía parlamentaria” y “Le hemos hecho presidente nosotros”, son algunas de las perlas que ha soltado en los medios este jueves tras conocer los nombramientos del nuevo Ejecutivo.

Según Pablo Iglesias, Grande-Marlaska, “Parece un ministro del PP que no está en el espíritu del cambio y me sorprende para mal”. También ha criticado el nombramiento de Maxim Huertas y ha pedido “Juzgarle por lo que haga y no por los tuits en los que defecaba sobre muchas cosas” y ha deslizado que “No votarán a favor de los presupuestos si estos vuelven al Congreso. “Somos un partido coherente que no vota un mes una cosa y otro, otra”, amenaza final directa a la línea de flotación del Presidente “a la moda”.

Imagen Mal empieza el Gobierno Glamour

En fin, la cosa es que desde los medios no sectarios, creo que debemos sacar a la luz las miserias de los que tan miserablemente han tratado a otros por lo mismo que ellos mismos han sido miserables.

Hay que decir que en principio, Pedro Sánchez sí tiene un doctorado y una tesis doctoral legal, aunque muy pocas personas han podido leerla.

Las cuestiones que se plantean para demostrar si esto es cierto son cómo, cuándo y dónde se pidió la admisión al programa de doctorado relacionado con su currículum universitario, cuándo se llevaron a cabo los cursos teóricos hasta llegar al total de créditos previstos para aspirar al doctorado, dónde está el certificado que acredita su superación, cómo, cuándo y dónde se hicieron los trabajos de investigación para la obtención del certificado de suficiencia, dónde encontrar los créditos obtenidos mediante el desarrollo de uno o varios trabajos de investigación tutelados por los departamentos correspondientes, comprobar si se pagó la matrícula para este segundo periodo caso de haber completado la docencia y si obtuvo el certificado acreditativo que lo confirmase, si una vez superados ambos periodos, solicitó el reconocimiento de la suficiencia investigadora, en la que se evaluaron sus conocimientos adquiridos, como, cuando y donde se realizaron, presentaron y aprobaron los turnos de la tesis doctoral, qué tribunal fue nombrado al efecto, cómo, cuándo y dónde se realizó la investigación sobre un tema inédito que nunca se hubiese estudiado antes y cómo, cuándo, dónde y ante quien se hicieron las dos partes de la tesis dividida en el examen y la discusión…porque, además, ¿Cuánto tiempo lleva obtener el doctorado?

La duración del doctorado puede variar, dependiendo del alumno, PERO CON UNA DEDICACIÓN COMPLETA PODRÍA CONSEGUIR que en un año se lograse la realización de los cursos de doctorado, otro año para realizar los trabajos de investigación y la obtención del certificado de suficiencia investigadora, y unos dos o tres años para para la tesis doctoral; a lo que hay que sumar el tiempo necesario para los trámites entre la finalización de la tesis y su lectura ante la Comisión del Doctorado, que puede abarcar unos tres meses.

Es decir, que una lumbrera con DEDICACIÓN EXCLUSIVA, tardaría MÁS DE CINCO AÑOS en acabarla. Obviamente, Pedro Sánchez no es una lumbrera y durante los 33 MESES (desde febrero del 2010 hasta noviembre de 2012) que dedicó a obtener su doctorado, estaba tanto en el Partido como en el Parlamento, hasta el 20 de Noviembre de 2011, en el que Pedro Sánchez se quedó fuera del Congreso tras la debacle socialista.

Su plan de vida pasó a la docencia y de paso, decidió dedicarle tiempo a la finalización del trabajo doctoral que había iniciado en el mes de febrero del año anterior en el mismo centro privado donde comenzó a impartir clases de Economía.

Eligió como directora a María Isabel Cepeda, la esposa de Jesús Neira, trágicamente fallecido en heroicas circunstancias. Así que, ni de lejos, pudo tener una dedicación exclusiva durante esos 33 meses. Algo no cuadra, don Ignacio Escolar.

Y por cierto, la tesis doctoral tiene el primer escollo en que el alumno pueda hallar un tema que lleve claramente a algún sitio que resuelva algo nuevo o que al menos, sea innovador. Muchas investigaciones se quedan en meras ideas y su temática no sale adelante por este motivo.

Tercer aviso, Ignacio Escolar, porque la tesis doctoral de Pedro Sánchez, por los testimonios que más adelante expondré en la Parte II, este bobo no cumple ninguno de estos requisitos y entonces sí podría constituir un delito la forma en que lo obtuvo.
Así, pues, dinos, Ignacio Escolar… ¿Qué hay del doctorado de Pedro Sánchez?

Continuará…